15 de mayo de 2024
Este artículo es un resumen del trabajo de investigación liderado por Adriana Melissa Ponce Vargas, investigadora CISTUR y Carla Elizabeth Jiménez Casablanca, docente investigadora CISTUR, quienes fueron seleccionadas como ganadoras de la Segunda Convocatoria de ORBITA para el Financiamiento de Tesis Sobre Turismo, Género y Desarrollo Sostenible en Bolivia.
Introducción
El turismo minero es un subsegmento del turismo industrial, cuyo origen se remonta al siglo XIX, resultado de la crisis de 1929 o Gran Depresión post Revolución Industrial durante la cual se generó un declive en la producción extractivista de Europa y Norteamérica, con el consecuente cierre de fábricas que luego dio lugar a que la gente tenga interés en saber sobre la historia de las grandes industrias.
Con los años surgió el turismo minero, entendido actualmente como el conjunto de actividades, realizadas para entender y apreciar la producción minera, a través de la exploración de minas y el conocimiento de su tecnología, maquinarias y métodos de extracción, entre otros, además de ofrecer a los visitantes la oportunidad de interactuar vivencialmente con los trabajadores del lugar.
Este tipo de turismo se realiza en minas subterráneas, cuya explotación de recursos mineros se desarrolla por debajo de la superficie del terreno, o en minas a cielo abierto, cuyos depósitos se localizan cerca de la superficie del terreno.
En cuanto a su clasificación, Pardo (2008) señala que por su tangibilidad el turismo minero se divide en dos categorías: tangible, centrado en los bienes materiales generados por la actividad, divididos a su vez en inmuebles (sitios mineros) y muebles (archivos documentales, fotografías y herramientas); e intangible, orientado a los conocimientos, formas de vida, saberes y costumbres resultantes de la actividad minera.
Considerando su enfoque, el turismo minero también puede ser productivo, promoviendo la visita a sitios activos para mostrar su proceso productivo; e histórico, impulsando la visita a sitios mineros inactivos, cuyo patrimonio se conserva en museos o centros de interpretación.
Debido a que América Latina ha basado su desarrollo económico en la explotación de recursos naturales, particularmente en la actividad minera, cuyos ciclos de producción extractivista son de corto plazo, países como Chile, Perú y México cuentan con importantes iniciativas turísticas mineras de éxito.
En contraste, aunque Bolivia es un país conocido por su pasado histórico minero y es un importante productor de minerales, con exportaciones por más de 1.600 millones de dólares trimestrales en 2022 (Ministerio de Minería Metalurgia, 2022, p. 69), carece de iniciativas turísticas mineras, ya que sus más de 500 minas (entre activas y cerradas) se encuentran fundamentalmente en zonas rurales deprimidas (Machicado y Castro, 2005).
Para encarar el desarrollo de un proyecto turístico es importante, además, tomar en cuenta el impacto negativo de la conclusión del ciclo minero, cuyas principales repercusiones son altos índices de desempleo, problemas de salud, tasas elevadas de migración, vulnerabilidad social, especialmente para mujeres y niños, así como un deterioro social generalizado en las comunidades mineras. A lo anterior se suman el daño ambiental y la contaminación, evidentes en las áreas de extracción y sus cercanías.
En ese contexto, resulta evidente la necesidad de una metodología objetiva e integral que permita a las poblaciones mineras considerar el turismo como alternativa de desarrollo productivo, económico y social, capaz de complementar la matriz económica de las minas en producción y/o compensar la inactividad económica en las comunidades donde las minas han parado sus actividades.
Metodología
En respuesta a la situación expuesta en líneas anteriores, este trabajo plantea el desarrollo y la validación de una herramienta metodológica que evalúe la potencialidad turística de sitios mineros desde una perspectiva sostenible, respondiendo a la pregunta ¿todos los sitios mineros tienen potencial para desarrollar actividad turística?
En esa línea, los componentes de la herramienta fueron trabajados a partir de fichas de inventariación turística, investigación de las características particulares de la industria minera, experiencias de turismo minero e indicadores de sostenibilidad.
Por otro lado, en el diseño metodológico se consideró el espacio turístico núcleo[1] donde se desarrollará el producto, tomando en cuenta aspectos como atractividad, acceso, señalización y seguridad; y el espacio complementario (unidad), que comprende servicios básicos, planta turística de hospedaje, transporte, alimentación y otros servicios complementarios[2].
Como consecuencia, la herramienta evalúa 21 dimensiones y 56 indicadores (ver las figuras 1 y 2). Adicionalmente, los indicadores se dividen en subindicadores que se encuentran descritos con mayor detalle en el documento de investigación completo del cual se deriva este blog.
A su vez, el instrumento clasifica las dimensiones y los indicadores de acuerdo con su grado de influencia en la viabilidad del desarrollo de un producto turístico minero, por lo cual se establecen parámetros de calificación por colores.
Para la validación de las dimensiones y los indicadores propuestos en la herramienta se seleccionaron dos espacios mineros con características diferentes: una mina subterránea, ubicada en un ecosistema semitropical y en ciclo productivo activo; y una mina a cielo abierto, en tierras altas y en ciclo productivo inactivo.
Figura 1. Herramienta metodológica para la evaluar el potencial turístico (parte 1)
. Fuente: Elaboración propia[1].
Figura 2. Herramienta metodológica para evaluar el potencial turístico (parte 2)
Fuente: Elaboración propia[4].
Resultados
Mina A: Campamento Minero Chojlla
Esta mina es subterránea y se encuentra en el valle de los Yungas, un ecosistema semitropical.
Factores críticos (rojo). Los factores críticos, representados en color rojo, tienen que ver con las dimensiones que resultan imprescindibles para la creación de un producto turístico minero y cuya ausencia podría dificultar fuertemente o impedir el desarrollo de una oferta turística con base en la actividad minera.
En el caso de la mina A, los ocho indicadores considerados de relevancia crítica fueron validados de forma positiva:
- Interés y compromiso de los trabajadores. Los trabajadores están interesados en ser parte de la iniciativa turística debido a que conocen los beneficios económicos de esta actividad como alternativa de ingresos a su trabajo actual.
- Interés y compromiso de la empresa. La empresa está interesada tanto en la creación de proyectos como en trabajar con los pobladores y entes gubernamentales para el desarrollo y la ejecución de productos turísticos.
- Interés de la población. Los pobladores están interesados en involucrarse en el desarrollo del turismo a través de emprendimientos propios y capacitaciones para prestar servicios turísticos.
- Percepción de la población respecto a la actividad turística. Los pobladores consideran que los atractivos son de gran importancia para la memoria colectiva y tienen potencial para recibir la visita de turistas.
- Acceso a servicios básicos. El sitio cuenta con acceso a agua potable, cuya frecuencia de abastecimiento es diaria; y con energía eléctrica, a través de tendido eléctrico aéreo y una planta hidroeléctrica. Respecto a los servicios de comunicación, cuenta con telefonía móvil y redes inalámbricas WiFi.
- La Mina A cuenta con vías de evacuación para los trabajadores en caso de accidente y ofrece un margen de 10 minutos para la detonación de explosivos, a fin de garantizar que el personal se traslade a una zona fuera de peligro. También cuenta con señalización adecuada para advertir de posibles zonas de derrumbe.
- Análisis del agua. Mediante estudios de laboratorio se determinó que el agua es potable debido a que la cantidad de bacterias coliformes que contiene está dentro de los parámetros establecidos.
- Frecuencia de abastecimiento del agua. El agua se suministra a diario a la población y su distribución solo presenta dificultades en caso de sequía.
Más allá de la metodología, los factores mencionados muestran que se debe hacer una lectura flexible y una reflexión técnico-profesional de los resultados.
Factores intermedios (naranja). Los factores intermedios, representados por el color naranja, son aquellos importantes para la viabilidad de la actividad turística en sitios mineros, pero cuya ausencia puede ser subsanada durante la planificación y ejecución del proyecto turístico. De un total de 16 indicadores con valor y relevancia intermedios, 13 fueron evaluados de forma positiva.
- Tradiciones orales.El espacio complementario (unidad) cuenta con tradiciones orales; en contraste con lo que ocurre en el espacio turístico núcleo, pese al esfuerzo de los trabajadores por mantener viva la historia colectiva.
- Documentos escritos y visuales. El espacio complementario (unidad) cuenta con libros sobre la historia del lugar, además de documentos y archivos históricos. Sin embargo, el espacio turístico núcleo no dispone de documentación registrada de manera pública.
- El sitio complementario cuenta con leyendas de gran importancia cultural y simbólica.
- Patrimonio arquitectónico. La empresa dentro las instalaciones brinda mantenimiento continuo a la maquinaria ubicada del cual tiene un gran impacto en la población debido a su pasado minero.
- Fiestas y actividades culturales. En torno a la actividad minera se tiene la ch’alla de carnaval , la ofrenda a la Pachamama o Madre Tierra en agosto y el Día del Minero en diciembre.
- Métodos de extracción minera. Hay información escrita sobre los métodos de extracción minera y las herramientas empleadas para realizar esta actividad.
- Cercanía a la población unidad. La distancia entre la mina y la población núcleo cercana es de cinco kilómetros.
- Tipo de vía. El tipo de vía para llegar a los sitios es de tierra.
- El lugar cuenta con cuatro alojamientos en el espacio turístico núcleo de la población cercana y con una casa de huéspedes en el campamento minero.
- Servicios de alimentación. Hay un comedor popular para los trabajadores mineros en el centro urbano de la población minera; mientras que en la población complementaria hay tres comedores populares que están abiertos los fines de semana.
- Tratamiento y disposición de la basura. La empresa minera cuenta con un servicio especializado para la recolección y el traslado de la basura a centros de tratamiento.
- Centros hospitalarios de primer nivel.El sitio complementario (unidad) cuenta con centros de salud de primer nivel capaces de ofrecer atenciones médicas básicas a los visitantes.
- Programas de sensibilización. La empresa minera realiza acciones para el cuidado del medio ambiente y capacita a sus trabajadores y a la población en general sobre el uso de duchas solares para ahorrar energía eléctrica. En el ámbito educativo, concientiza a los estudiantes sobre el cuidado del medio ambiente a través del reciclaje en la escuela.
En tanto que tres factores intermedios fueron evaluados de forma negativa y deben ser mejorados:
- Centros hospitalarios de segundo nivel. Debido a que el sitio no cuenta con centros médicos de segundo nivel, carece del equipamiento necesario y de capacidad de respuesta para atender accidentes graves y otras emergencias médicas.
- Se observaron residuos de basura orgánicos e inorgánicos en el lugar. A pesar de los esfuerzos educativos, la presencia de estos residuos en el lugar evidencia la necesidad urgente de medidas más eficaces para la gestión de residuos que permitan conservar el entorno natural y la calidad del turismo.
- Documentos escritos y visuales. Pese a la riqueza cultural y la cantidad de años de funcionamiento de la mina, la cantidad de documentos que conservan la memoria histórica del sitio es limitada.
Factores complementarios (amarillo). Los factores complementarios, representados con color amarillo, son aquellos que, si bien no son indispensables como condición previa para el desarrollo del producto y de faltar no lo limitarían, permitirían una experiencia turística significativa. En la mina A, de 13 factores complementarios, 11 fueron evaluados positivamente:
- Atractivo visual de la mina. La bocamina del sitio es visualmente atractiva debido a su amplia dimensión y buen estado.
- Los túneles de la mina son amplios y ofrecen un recorrido de aproximadamente 20 minutos, además de la posibilidad de desarrollar otras actividades en conjunto con los trabajadores.
- Señalización de seguridad. La mina cuenta con vías de evacuación claramente señalizadas para los trabajadores en caso de accidente, además de señales de advertencia y procedimientos.
- Riesgo de deslizamiento. La mina cuenta con sitios seguros correctamente señalizados para evitar accidentes en caso de movimientos de tierra.
- Resguardo ante derrumbes. En caso de derrumbes hay espacios donde el personal y posibles visitantes pueden refugiarse para evitar daños a su integridad.
- Iluminación. La mina cuenta con un tendido eléctrico aéreo que proviene de la ciudad y suministra energía a todo el campamento minero.
- Acceso a agua. La Mina A obtiene agua potable de la población núcleo, tanto para actividades de explotación minera como para el aseo de los trabajadores.
- Terminales de llegada. En la población hay sindicatos de transporte y un punto de parada para la llegada de visitantes.
- Frecuencia de viaje. Las salidas y llegadas al sitio son diarias y en horarios específicos.
- Transporte regular. Tanto el transporte público como privado en el lugar son regulares.
- Cercanía de atractivos turísticos. En auto, el tiempo de viaje entre los sitios más atractivos es de 20 minutos; mientras que el recorrido caminando toma 45 minutos.
En tanto, dos factores intermedios inherentes a la población centro fueron evaluados negativamente y requieren mejoras en los planes de desarrollo del producto:
- Señalización vial. El sitio debe instalar señalizaciones de tránsito en la vía de acceso a la población, además de señalética turística.
- Cultura gastronómica. El lugar requiere labores de investigación sobre el patrimonio alimentario para mejorar la experiencia gastronómica de los posibles visitantes.
Conclusiones Mina A. De los treinta y siete indicadores analizados: ocho son factores críticos, 16 son intermedios y 13 son factores complementarios; del total, 32 fueron evaluados de forma positiva, en tanto que solo cinco fueron evaluados negativamente. Dado que en su mayoría tanto el espacio turístico núcleo como el espacio complementario obtuvieron resultados favorables, se determina que el sitio evaluado tiene potencial para desarrollar un producto turístico minero de alto interés y atractividad.
Mina B[5]
Se trata de una mina a cielo abierto, ubicada en el altiplano.
Factores críticos (rojo). En este punto se consideraron ocho indicadores, cinco de los cuales fueron evaluados de forma positiva.
- Interés y compromiso de los trabajadores. Los trabajadores están interesados en ser parte de la actividad turística para contar con una fuente de ingresos extra.
- Interés y compromiso de la empresa. Las cooperativas están interesadas en participar de forma conjunta con la comunidad, a fin de reactivar el ingenio minero por su importancia histórica.
- Interés de la población. Los pobladores están interesados en involucrarse en el desarrollo del turismo a través de servicios de alimentación y hospedaje, y como anfitriones en las actividades culturales que se realicen.
- Percepción de la población respecto a la actividad turística. Los pobladores consideran que los atractivos y los paisajes naturales de importancia que los circundan deben ser valorizados por su importante legado cultural.
- Acceso a servicios básicos. El sitio cuenta con acceso al agua a través de cañerías y un estanque de almacenamiento; mientras que la electricidad es distribuida mediante una red de tendido eléctrico aéreo. Respecto a los servicios de comunicación, cuenta con telefonía móvil y redes inalámbricas WiFi.
A diferencia de los anteriores, tres factores fueron calificados negativamente:
- Análisis del agua. Mediante estudios de laboratorio se determinó que el agua no es potable debido a que la cantidad de bacterias coliformes que contiene está fuera de los parámetros establecidos. De acuerdo con el informe de ensayo para el análisis microbiológico, la cantidad de bacterias coliformes es un factor de compleja resolución a corto plazo y un peligro para población y para los visitantes.
· Suministro de agua. Otro factor crítico negativo tiene que ver con el abastecimiento de agua, el cual no es continuo.
- Frecuencia de abastecimiento. El agua se distribuye los sábados y domingos y un día entre semana, lo cual implica que el suministro se suspende el resto de los días.
Factores intermedios (naranja). La evaluación incluyó el análisis de 16 indicadores, 13 de los cuales fueron evaluados de forma positiva:
- Tradiciones orales. El espacio turístico núcleo cuenta con historias de gran importancia respecto a la minería, al igual que la población aledaña.
- Documentos escritos y visuales. Se cuenta con investigaciones acerca de la música en la población y el origen de las danzas originarias de los pueblos mineros.
- El espacio complementario cuenta con leyendas de gran importancia cultural tanto para la población como para los trabajadores mineros.
- Documentos relativos a la actividad minera. Estos documentos son de carácter público y se encuentran en el museo de la localidad.
- Fiestas y actividades culturales.El espacio turístico núcleo cuenta con una festividad durante la cual se presenta una danza inspirada en los trabajadores mineros, además de actividades mineras como la ch’alla.
- Cercanía a la población unidad. La distancia entre la población complementaria y el espacio turístico núcleo minero, situado en Uncía, es de aproximadamente 0.5 km.
- Tipo de vía. La vía para llegar a los sitios señalados es asfaltada y de piedra.
- Cuenta con dos alojamientos de categoría A, con baño público y privado.
- Servicios de alimentación. Hay un restaurante donde a diario se sirven platos nacionales e internacionales, además de comedores populares que abren de lunes a domingo.
- Tratamiento de basura. La población cuenta con un servicio de recolección de basura encargado de realizar procedimientos especializados para su tratamiento.
- Disposición final de la basura. Los desechos se encuentran en un sitio específico alejado de la población.
- Centros médicos.El espacio complementario (unidad) cuenta con centros de salud de primer nivel que disponen de salas de parto y de internación, además de atender enfermedades básicas. También hay un centro hospitalario de la Caja Nacional de Salud (CNS), donde hay especialidades como pediatría, odontología, neumología y radios X.
- Programas de sensibilización. La población participa continuamente en charlas y programas sobre el recojo y reciclaje de basura, a fin de mitigar su impacto negativo en el medio ambiente. En cuanto al ámbito educativo, la empresa minera coordina con la Alcaldía para que los niños aprendan respecto a las ventajas de cuidar la naturaleza y su entorno.
En tanto que tres indicadores intermedios fueron evaluados de forma negativa:
- Se observó residuos orgánicos e inorgánicos en las zonas mineras.
- Patrimonio arquitectónico. Aunque el entorno que rodea a la posible actividad turística tiene atractividad, este se encuentra descuidado y requiere importantes inversiones para que su uso se
- Métodos de extracción minera. Son básicos. Se necesita una inversión para mejorar los procedimientos de extracción minera.
Factores complementarios (amarillo). En este caso, de los 13 factores considerados, ocho fueron evaluados de forma positiva:
- Atractivo visual. La mina es visualmente atractiva por los vestigios de su pasado histórico, como la maquinaria y las herramientas utilizadas durante la producción minera.
- Por su amplitud, el sitio ofrece la posibilidad de realizar caminatas y disfrutar el paisaje minero.
- Acceso a agua. La mina recibe el suministro de agua de la población núcleo, tanto para sus actividades de explotación minera como para la limpieza de los trabajadores.
- Terminales de llegada. La población cuenta con un punto de parada a donde llegan los visitantes y donde se encuentran los sindicatos de transporte. También hay una terminal terrestre en la población núcleo más cercana.
- Frecuencia de transporte. El sindicato de transporte del lugar ofrece sus servicios con vehículos que salen cada 30 minutos, todos los días.
- Transporte regular. Tanto de transporte público como privado funcionan de manera regular.
- Cercanía de atractivos turísticos. El recorrido desde la población núcleo hasta los atractivos más próximos demora 15 minutos en auto y 30 minutos si se realiza a pie.
· Cultura gastronómica. La población cuenta con platos tradicionales elaborados con productos de la región, tales como lawa de chuño, picante de gallina y charquecán.
Por otro lado, cinco indicadores complementarios fueron evaluados de forma negativa, debido a que no cumplían con las condiciones necesarias:
- Señalización urbana. No se encontró señalización vial, de tránsito ni señalética turística que garanticen una circulación para que las visitas sean
- Señalización de seguridad. En su interior, la mina no cuenta con señalizaciones de seguridad que permitan una visita segura.
- Riesgo de deslizamiento. La mina tampoco cuenta con sitios adecuados para circular y/o resguardarse en caso de accidentes por movimientos de tierra.
- Peligro de derrumbe. La mina no tiene parámetros ni medidas de seguridad para evitar accidentes en caso de derrumbe.
- Iluminación. La mina no cuenta con instalaciones de iluminación que ayuden a crear un entorno donde las estructuras y formaciones rocosas sean atractivas para los visitantes.
Conclusiones Mina B. De los 37 indicadores analizados: ocho son factores críticos, 16 son intermedios y 13 son factores complementarios; del total, 26 fueron evaluados de forma positiva, en tanto que 11 fueron evaluados negativamente. Sin embargo, debido a que la evaluación del sitio minero muestra deficiencias significativas en indicadores críticos (estructurales) que limitan el potencial turístico del sitio minero estudiado, se determinó que el desarrollo del producto turístico minero en el lugar es inviable.
Conclusiones
En el entendido de que no todos los sitios mineros tienen potencial para el desarrollo de productos turísticos, la herramienta propuesta en el presente trabajo ha demostrado ser válida para la evaluación de la potencialidad turística de este tipo de espacios. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los resultados pueden variar según las características particulares de cada población. En esa línea, es recomendable ajustar los parámetros de medición de acuerdo con la forma de vida, topografía y características, tanto de la población minera como de la comunidad local a evaluar.
Tras la validación de resultados se identificó la necesidad de incorporar aspectos que no fueron evaluados y deben incluirse en futuras investigaciones para perfeccionar la metodología propuesta. También se recomienda profundizar en el análisis de los problemas y desafíos que enfrentan las poblaciones mineras (ver figuras 1 y 2), considerando los siguientes aspectos:
- Análisis de grupos etarios predominantes, a fin de verificar que haya población con edad adecuada para el desarrollo de un proyecto turístico y la prestación de servicios.
- Indicadores de enfoque de género, dado que las minas son sitios de trabajo tradicionalmente masculinos y, en contraposición, el turismo se presenta como una actividad que potencia el empleo femenino.
- Medición del deterioro ambiental (en coherencia con el enfoque sostenible de la herramienta), tomando en cuenta indicadores como la calidad del aire y el análisis de los posibles riesgos dentro de la mina (por ejemplo, peligro de derrumbe o deslizamientos en espacios adyacentes a la explotación minera), capaces de afectar las actividades turísticas.
- Evaluación de la gobernanza en el espacio turístico, considerando el nivel de coordinación entre los entes gubernamentales, la empresa minera y los liderazgos locales, a fin de determinar los intereses de cada grupo y tener una visión completa y consensuada respecto al desarrollo del producto turístico minero.
- Desarrollo de estudios de mercado, para conocer la potencialidad turística y la viabilidad económica del producto, según las necesidades y expectativas de los segmentos de mercado, y cuyos resultados faciliten la toma de decisiones en torno al diseño del posible producto turístico minero.
Las recomendaciones planteadas contribuirán a obtener resultados más precisos y a desarrollar estrategias y proyectos turísticos adecuados y sostenibles en los sitios mineros a ser estudiados.
Pie de nota
[1] Para el diseño de la herramienta se tomó en cuenta la teoría de espacio turístico formulada por Roberto Boullón (2006), para quien el espacio turístico es el lugar geográfico que genera una actividad turística emisora o receptora en cualquier país, región o localidad capaz de atraer una corriente turística por sus características climáticas, naturales, históricas y artísticas, entre otras. En ese contexto, el autor plantea que el espacio turístico núcleo son “agrupaciones menores de diez atractivos turísticos de cualquier jerarquía y categoría, que están aisladas en el territorio” (p. 80), siendo el área central donde se encuentran los atractivos principales; mientras que el espacio complementario o unidad turística está conformado por “concentraciones de mínimo equipamiento que se producen para explotar intensivamente uno o varios atractivos situados uno junto al otro o (…) uno dentro del otro” (2006, p. 79) y que comprenden áreas que, si bien no forman parte de la experiencia turística central, contribuyen de manera significativa e integral a la oferta dirigida al visitante, a través de servicios de apoyo, actividades adicionales o recursos complementarios que enriquecen la visita turística.
[3] El gráfico detalla las dimensiones a tomar en cuenta para evaluar el potencial del espacio turístico núcleo.
[4] El gráfico detalla las dimensiones a tomar en cuenta para evaluar el potencial del espacio turístico núcleo.
[5] No se tiene permiso para publicar el nombre de la mina B.
Referencias
Boullón, R. (2006). La teoría del espacio turístico. En Planificación del espacio turístico (pp. 56-92). Trillas.
Machicado, C. G. y Castro, L. (2005). Diagnósticos sectoriales: sector minero (1990-2003). Unidad de Análisis de Políticas Sociales y Económicas (Udape). https://www.udape.gob.bo/portales_html/diagnosticos/diagnostico2005/documentos/Documento%20Sector%20Minero.pdf
Ministerio de Minería Metalurgia. (2022). Situación de la minería y boletín estadístico primer trimestre 2022.
Pardo, C. J. (2008). Turismo y patrimonio industrial: un análisis desde la perspectiva territorial. Síntesis.
Rodríguez López, F., Guzmán Prudencio, G., de Marchi Moyano, B. y Escalante Pacheco, D. (2020). Efectos de la minería en el desarrollo económico, social y ambiental del Estado Plurinacional de Bolivia. Naciones Unidas, CEPAL. https://hdl.handle.net/11362/45682