Por: Anna Lavooi
06 de noviembre de 2023
En los países de América Latina con una gran población indígena, como es el caso de Bolivia, el turismo cultural juega un rol significativo, ya que la cultura indígena forma un atractivo turístico importante (Baud & Ypeij, 2009, p. 1). La presente investigación analiza los impactos del turismo cultural en las mujeres indígenas que trabajan en el sector, con el objetivo de comprender, desde una perspectiva local, en qué medida el turismo cultural puede contribuir al desarrollo sostenible, enfocado en la reducción de la desigualdad de género en articulación con otras dimensiones de desigualdad (etnicidad y lugar de residencia). Para llegar a esta comprensión, se realizó un estudio cualitativo en tres grupos de mujeres indígenas que trabajan en turismo cultural en el municipio de El Alto: las Cholitas Luchadoras, las Cholitas Escaladoras y las mujeres guías.
El informe de Brundtland (1987), ‘Nuestro Futuro Común’, define el desarrollo sostenible como “la satisfacción de las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades” (Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, 1987, p. 59). Esta definición se enfoca en tres dimensiones: el crecimiento económico, la inclusión social y el cuidado del medio ambiente. Para poder lograr la sostenibilidad, Naciones Unidas creo la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible con 17 objetivos. La presente investigación se enfoca en el objetivo de desarrollo sostenible (ODS) 5: lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y niñas, y el ODS 10: reducir la desigualdad en y entre los países. Es importante entender que la región Andina es una de las regiones más desiguales del mundo (Schorr, en prensa). Además, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ha subrayado la necesidad de abordar la reducción de la desigualdad como un objetivo fundamental en América Latina (Schorr, en prensa). En este contexto, es importante destacar que las mujeres que son parte de esta investigación enfrentan desigualdades basadas en su género, etnicidad, vestimenta y lugar de residencia.
Varios estudios (Little, 2004; Zorn, 2004; Sammels, 2014) han demostrado que la mujer indígena tiene un rol importante en el turismo, ya que ella representa la cultura indígena y la autenticidad que los turistas quieren ver. La presente investigación analiza, en qué medida este rol y posición podrían empoderarlas para contribuir a la reducción de desigualdades sociales. Se utilizó el marco conceptual propuesto por Scheyvens & van der Watt (2021) para analizar la relación entre empoderamiento y la industria turística, el cual abarca diversas dimensiones, incluyendo la económica, política, social, psicológica y cultural. Asimismo, se utilizó la definición de empoderamiento de dichas autoras (2021, p. 3):
‘El empoderamiento se entiende como la activación de la confianza y las capacidades de individuos o grupos previamente desfavorecidos o privados de derechos, de modo que puedan ejercer un mayor control sobre sus vidas, desafiar las relaciones desiguales de poder, movilizar recursos para satisfacer sus necesidades y trabajar para lograr la justicia social.’
Resultados relacionados con el empoderamiento
Empoderamiento: dimensión económica
Esta dimensión se refiere, entre otros, a la obtención de ingresos económicos (duraderos) (Scheyvens & Van der Watt, 2021, p. 10). En el análisis de los ingresos, los factores que se incluyeron fueron: la satisfacción con estos ingresos y la brecha salarial de género. El desempoderamiento puede ocurrir cuando, por ejemplo, hay una distribución desigual de los ingresos (Scheyvens y van der Watt, 2021, p. 11).
Primeramente, se debe mencionar que el análisis de empoderamiento económico se enfocó en los grupos de las Cholitas Escaladoras y las Cholitas Luchadoras. El grupo de las mujeres guías retomaron sus actividades después de la pandemia, por lo cual resultó difícil analizar la relación entre sus actividades y la dimensión económica.
Es importante destacar que, las Cholitas Luchadoras tienen una ventaja salarial en comparación con sus compañeros luchadores, ya que ellas son la atracción turística principal. Sin embargo, la mayoría no se siente satisfecha con el monto pagado. Esta insatisfacción está relacionada con una distribución desigual de los ingresos entre las luchadoras y los empresarios/ organizadores. Para este grupo de estudio, la distribución desigual (vertical) contribuye al desempoderamiento económico.
En el caso de las Cholitas Escaladoras, resulta fundamental comprender que el aumento en sus ingresos se produjo tras completar la «Formación Inicial» que les permitió desempeñar como guías de alta montaña en lugar de trabajar como cocineras o porteras. Es importante señalar que, en la actualidad, perciben ingresos iguales a los de sus esposos, quienes son guías nacionales certificados. Esto se debe a que ellas tienen la capacidad de solicitar el mismo nivel de remuneración, ya que son altamente valoradas por los turistas.
En comparación con las Cholitas Luchadoras, la mayoría de las Cholitas Escaladoras se muestran satisfechas con sus ingresos. Esta disparidad se fundamenta en las dinámicas laborales, que tienen un componente político, y en su participación en la toma de decisiones relacionadas con sus ingresos. En resumen, en el caso de las Cholitas Escaladoras, se observa un empoderamiento económico en términos de ingresos. Sin embargo, es crucial destacar que las Cholitas Escaladora fueron las más afectadas por la pandemia, ya que el sector turístico se constituye en su principal fuente de ingresos. La inestabilidad en este sector y su impacto en los ingresos fueron aspectos mencionados por los tres grupos (también en relación con la sostenibilidad). Indudablemente, este no es un tema nuevo, pero sigue siendo de gran relevancia, por lo que debería ser considerado en la elaboración de planes y programas de capacitación turística, por ejemplo.
Empoderamiento: dimensión política
Esta dimensión está relacionada con la participación y la toma de decisiones de los actores en cuanto al sector turístico donde desarrollan sus actividades (Scheyvens & Van der Watt, 2021, p. 11). En el caso de las Cholitas Luchadoras, el empoderamiento político es mínimo. Los resultados demuestran que adentro del ring o durante las peleas, tienen el poder de tomar decisiones dependiendo de su experiencia. Sin embargo, fuera del ring, su participación en la toma de decisiones es limitada. Además, la gestión de las actividades turísticas está en manos de una agencia externa. Lo que destaca en su caso, son las relaciones laborales verticales y, dentro de estas, sienten que ocupan una posición subordinada.
En el caso de las Cholitas Escaladoras, las relaciones laborales tienen una influencia mucho más positiva. Ellas trabajan de forma independiente, en colaboración con sus familias. En este contexto, tienen la oportunidad de participar en la toma de decisiones. Por lo tanto, en el caso de las Cholitas Escaladoras, se evidencia un claro empoderamiento en la dimensión política. En el caso de las mujeres guías, el empoderamiento político se manifiesta cuando tienen la capacidad de participar en la organización de los tours y en la toma de decisiones dentro de la asociación.
En relación con el nivel estatal, no ocurre empoderamiento en la dimensión política, para ninguno de los tres grupos. No existen espacios colaborativos entre los actores e instituciones gubernamentales. La falta de apoyo por parte del estado fue un tema mencionado de manera prácticamente unánime. Se destacó que, los cambios en el gobierno y la falta de apoyo estatal tienen un impacto negativo en la sostenibilidad.
Empoderamiento: dimensión social
El empoderamiento social se refiere al fortalecimiento de los lazos de cohesión social a través del turismo y puede incluir inversiones en proyectos que beneficien a la comunidad en su conjunto. Por otro lado, el desempoderamiento social puede manifestarse en situaciones donde, por ejemplo, la envidia afecta a la armonía comunitaria (Scheyvens & Van der Watt, 2021, p. 11).
En el caso de las Cholitas Escaladoras, el empoderamiento social ocurre, a través de la capacitación de nuevas integrantes para convertirse en escaladoras. Como sostienen Scheyvens & Watt (2021), esta capacitación a otros miembros de la comunidad para que también puedan beneficiarse del turismo es considerada una forma de empoderamiento social. No obstante, tanto las Cholitas Escaladoras como las Luchadoras también experimentan desempoderamiento, ya que ciertos conflictos internos han disminuido su cohesión social.
Empoderamiento: dimensión psicológica
El empoderamiento psicológico se refiere al fortalecimiento de la autoestima, una mejor posición social y un mayor sentimiento de orgullo, derivados de interacciones con turistas o del reconocimiento cultural por parte de estos últimos (Scheyvens & van der Watt, 2021, p. 11). Este tipo de empoderamiento se manifiesta en los tres grupos y, por ende, posee una relevancia considerable. En ambos casos, el empoderamiento psicológico está relacionado, por ejemplo, con los nuevos roles sociales que asumen, tanto en términos de género como de etnia. El reconocimiento internacional que obtienen por representar estos roles sin duda ha aumentado su sentimiento de orgullo. Otro aspecto significativo, es la superación del «miedo a hablar», una experiencia compartida por el grupo de las guías y las escaladoras. Ambos grupos identificaron la timidez y el miedo a hablar como rasgos femeninos. Sin embargo, la participación en actividades turísticas y la interacción con personas de distintas nacionalidades ha contribuido a superar esta timidez y a fortalecer su autoestima.
Empoderamiento: dimensión cultural
Esta dimensión se relaciona con el orgullo de una identidad étnica, como consecuencia del interés y respeto por la cultura de la comunidad visitada que demuestran los turistas. Además, es crucial permitir que las poblaciones indígenas y otros grupos étnicos representen su propia cultura (Scheyvens & Van der Watt, 2021, p. 12-13). En esta investigación sobre el turismo cultural, esta dimensión cobra un rol fundamental. Los tres grupos encuentran diversas formas de manifestar su cultura. Las Luchadoras y Escaladoras lo hacen a través de prendas, como ‘la pollera’, mientras que las mujeres guías representan distintos aspectos de la cultura alteña. En este sentido, se observa un empoderamiento cultural en los tres grupos.
Cabe destacar que, los recorridos por El Alto también tienen como objetivo desafiar los estereotipos previamente existentes sobre su ciudad, lo que demuestra que los actores involucrados consideran que el turismo tiene el potencial de contribuir a deconstruir estereotipos negativos y, por ende, reducir la desigualdad.
Comentarios finales acerca del empoderamiento
El análisis del empoderamiento revela que, en los tres estudios de caso se observan tendencias positivas en cuanto al empoderamiento en algunas dimensiones o niveles. Siguiendo la perspectiva de Scheyvens & van der Watt (2021, p. 14), es poco común encontrar ejemplos prácticos en los que el empoderamiento se manifieste en todas las dimensiones. Además, los resultados de la presente investigación también ponen de manifiesto que, dentro de esas dimensiones, el empoderamiento puede darse en ciertos niveles, pero no en otros.
En resumen, al abordar el empoderamiento de un grupo, la pregunta clave no es si una actividad en particular puede o no contribuir al empoderamiento, sino más bien en qué dimensiones, niveles o contextos sociales se puede fomentar el empoderamiento (y en cuáles no), así como las razones subyacentes que influyen en estas diferencias.
Reducción de desigualdades sociales
Entonces, ¿de qué manera el trabajo en turismo cultural puede contribuir a la reducción de la desigualdad y, por ende, al desarrollo sostenible?
En primer lugar, es crucial mencionar la desigualdad territorial, en este caso centrada en el lugar de residencia, que es la ciudad de El Alto. Según los informantes, los habitantes de El Alto a menudo se enfrentan a la estigmatización, un factor determinante en la creación de desigualdades (CEPAL, 2016, p. 20). Lo que resulta especialmente relevante, es que el grupo de las mujeres guías utiliza el turismo, en particular los city tours, como una estrategia para desafiar y cambiar los estigmas negativos asociados con esta ciudad. A través de su trabajo en turismo cultural, buscan reducir o eliminar estos estigmas y, de esta forma, contribuir a la consecución del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 10.
En segundo lugar, se abordó la relación entre la desigualdad de género y etnia. Para comenzar, es importante resaltar que esta investigación confirma que el sector turístico ofrece oportunidades laborales a mujeres indígenas, incluso a aquellas con niveles de educación más bajos. Esto adquiere relevancia porque en el caso de las mujeres de pollera, a menudo se las excluye del ámbito laboral y se las limita a ocupaciones específicas, como la cocina o el mercado (Rodríguez García, 2010, p. 48). En el contexto del turismo cultural, no solo se acepta a las mujeres de pollera, sino que se las valora. Además, las Luchadoras y Escaladoras no solo han ganado reconocimiento internacional por ser mujeres de pollera, sino también por asumir roles tradicionalmente no asignados a ellas. Utilizan el espacio turístico como una plataforma para transmitir un mensaje poderoso: las mujeres de pollera pueden y quieren trabajar en otros ámbitos laborales. En este sentido, el turismo se convierte en una estrategia para reducir la desigualdad de género y étnica en el ámbito laboral, contribuyendo así a los ODS 5 y 10.
Bibliografía
Baud, M. & Ypeij (2009) Cultural Tourism in Latin America: The politics of space and imagery. Brill
CEPAL (2016) La matriz de la desigualdad social en América Latina. Recuperado de https://repositorio.cepal.org/bitstream/handle/11362/40668/4/S1600946_es.pdf
Mowforth, M., & Munt, I. (2009). Tourism and sustainability: Development and new tourism in the Third World (3rd ed.). Routledge.
Little, W. (2004) Mayas in the Marketplace: Tourism, Globalization, and Cultural Identity. University of Texas Press.
Rodriguez Garcia, H. (2010) Genero, mestizaje y estereotipos culturales: el caso de las cholas bolivianas. Maguaré, 24, 37-67
Sammels, C. (2014) Bargaining Under Tatch Roofs: Tourism and the Allure of Poverty in Highland Bolivia. En Eds Picard, D. & Giovine, A. Tourism and Power of Otherness: Seductions of Difference (pp. 124- 137). Channel View Publication.
Scheyvens, R.; van der Watt, H. Tourism, Empowerment and Sustainable Development: A New Framework for Analysis. Sustainability 2021, 13,
Schorr, B. (en prensa) “Los Andes: Cumbres de desigualdad, brechas de bienestar y sustentabilidad”, en: Henríquez, Narda y Vila, Gisselle (eds.), Desigualdades y desarrollo en la región andina. PUCP/CISEPA.
Zorn, E. (2004) Weaving a Future: Tourism, Cloth, and Culture on an Andean Island. University of Iowa Press.
Este blog es un resumen del trabajo de investigación realizado por Anna Lavooi, quien fue elegida como uno de los 10 investigadores en el marco de la Primera Convocatoria para Financiamiento de Tesis Sobre Turismo, Género y Desarrollo Sostenible en Bolivia.